Valerie Ann Almodóvar Ojeda fue atacada con un cuchillo en un periodo de 23 minutos el 17 de diciembre de 2018, lo que eventualmente desembocó en su muerte.
Esa fue la conclusión del agente investigador del caso, Félix Rodríguez Cortés, quien finalizó hoy su testimonio en el juicio por asesinato contra el muralista ponceño Juan Luis Cornier Torres en el Tribunal de Ponce.
Rodríguez Cortés explicó que los 23 minutos están comprendidos entre la 1:28 p.m. y 1:51 p.m., cuando la guagua Nissan Pathfinder de Valerie Ann estuvo estacionada en la barriada Baldorioty en Ponce, donde vive Cornier Torres.
Omar Binet Ojeda, quien verificó la ruta registrada por el GPS instalado en ese vehículo, testificó esta semana que la guagua se estacionó a la 1:28 p.m. en la calle Global, que corre paralela a la avenida Roosevelt y ubica detrás del bloque donde está la casa de Cornier. La próxima vez que la guagua se encendió fue a la 1:51 p.m., según el GPS.
Por otro lado, la extracción de información del celular de Valerie Ann arrojó que envió su último mensaje a Cornier Torres, con quien iba a encontrarse, a la 1:00:49 p.m.
Ayer no se estableció qué hizo Valerie Ann entre la 1:00 p.m. y 1:28 p.m., pero el policía abordó el tema hoy durante el contrainterrogatorio que le hizo el abogado José Colón Pérez.
¿De la 1:00 p.m. a 1:28 p.m. tiene información de que la guagua sigue moviéndose?, preguntó el abogado.
“Sí”, respondió el testigo.
El momento exacto del ataque no se pudo establecer.
“La hora específica no la pude determinar”, dijo el agente, antes de ser interrumpido por el abogado, lo que provocó la objeción del Ministerio Público.
“No se determinó hora específica porque, según mi investigación, los hechos ocurrieron de 1:28 p.m. a 1:51 p.m.”, añadió el décimo y último testigo de cargo.
¿El asesinato ocurrió en 23 minutos?, cuestionó el abogado.
“El comienzo del asesinato”, contestó el agente.
Para la Policía y la Fiscalía, en esos 23 minutos, Valerie Ann fue atacada por Cornier Torres en la sala de su casa, localizada en la avenida Roosevelt en la barriada Baldorioty. A la 1:51 p.m., según el GPS, la guagua de Valerie Ann salió de la calle Global y regresó a la calle Gardel esquina Roosevelt -que es el acceso más cercano a la casa de Cornier Torres- a las 2:09 p.m.
Rodríguez Cortés afirmó que en ese recorrido Cornier Torres buscó a su vecino Carlos Pacheco Santiago (“Amarillo”) para que le ayudara a limpiar la escena del crimen.
Pacheco Santiago testificó haber visto a Valerie Ann tendida en el suelo de la casa de Cornier Torres, herida pero viva, y que Cornier la apuñaló en el cuello y la mató en su presencia. Por eso las autoridades establecen que el asesinato “comenzó” entre la 1:28 p.m. y la 1:51 p.m., porque al darle validez al testimonio de Pacheco Santiago se sobreentiende que la muerte ocurrió posterior a las 2:09 p.m.
El abogado llevó al policía a admitir que no hizo constar en ningún documento, ni en la acusación, que su conclusión fue que el crimen ocurrió entre la 1:28 p.m. y 1:51 p.m.
Luego de concluido el contrainterrogatorio el fiscal no hizo preguntas adicionales, por lo que el Ministerio Público dio por sometido su caso.
El próximo 3 de noviembre, desde las 9:30 a.m., los abogados de Cornier Torres entrevistarán a nueve testigos que la Fiscalía no usó y puso a su disposición. Cuando culminen ese proceso deberán informarle al juez Daniel López González si usarán a alguno de ellos como testigo y desfilaría la prueba desde ese mismo día. Los informes finales se pautaron, preliminarmente, para el 4 de noviembre.
Los fiscales son Marjorie Gierbolini Gierbolini, Ildefonso Torres Rodríguez y Sharleen Rosa de Jesús. Cornier Torres está representado por los abogados Juan de Jesús Vélez Rodríguez, José Figueroa Zayas y José Colón Pérez.
Según la Fiscalía, Cornier Torres asesinó a la teatrera, chef y universitaria Valerie Ann Almodóvar Ojeda, de 23 años de edad, el 17 de diciembre de 2018 en su casa en Ponce, y luego dispuso del cadáver en la carretera 518 en el barrio Garzas de Adjuntas.
Cornier Torres enfrenta un cargo por el artículo 93 del Código Penal (asesinato en primer grado) y un cargo por el artículo 5.05 de la Ley de Armas. El juicio en su fondo inició luego de que la Fiscalía le archivara un cargo de destrucción de pruebas cuando este se disponía a hacer alegación de culpabilidad por ese delito.
