El término artritis significa, literalmente, inflamación de las articulaciones (artr = articulación, itis = inflamación) y existen más de 100 tipos, de acuerdo con la Fundación de Artritis de Estados Unidos.
La artritis provoca dolor, rigidez, hinchazón, enrojecimiento y disminución de la amplitud del movimiento en las articulaciones del cuerpo, y está asociada a otras enfermedades que también afectan los huesos, los músculos y los tejidos.
Los síntomas pueden ser leves y continuos, o intensos y repentinos. La artritis también puede causar otros problemas que no parecen relacionados, como fatiga o erupciones.
La artritis grave afecta manos y pies, y puede dificultar las tareas diarias de los individuos. No obstante, los tratamientos actuales permiten a la mayoría de las personas con artritis llevar una vida activa y productiva.
Mayo es el mes de la Prevención, Tratamiento y Cuidado de la Artritis en Puerto Rico, y a continuación te brindamos información esencial para conocer y entender esta enfermedad.
Tipos más comunes
Uno de los tipos más comunes de artritis es la artrosis, que lesiona el cartílago articular. Por consiguiente, produce dolor, rigidez e incapacidad funcional. Normalmente, la artrosis se localiza en la columna cervical y lumbar, algunas articulaciones del hombro y de los dedos de las manos, la cadera, la rodilla y la articulación del comienzo del dedo gordo del pie.
Otro tipo común es la artritis reumatoide. Según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades, la misma afecta las articulaciones de las muñecas, las manos, los pies, la columna vertebral, las rodillas y la mandíbula. Es un trastorno autoinmunitario porque el sistema inmunitario ataca los tejidos sanos de las articulaciones. Este tipo de artritis puede originar un cansancio inusual, fiebres esporádicas y pérdida del apetito, así como problemas en el corazón, los pulmones, la sangre, los nervios, los ojos y la piel.
Además, el lupus es una enfermedad autoinmunitaria que desencadena inflamación en diferentes tejidos del cuerpo. El tipo más común es el lupus eritematoso sistémico, el cual afecta diferentes partes del cuerpo, incluso órganos internos.
Por último, la fibromialgia es un trastorno crónico de larga duración que causa dolores musculares y fatiga. Las personas con fibromialgia tienen dolor y sensibilidad en todo el cuerpo.
Detección y diagnóstico
De acuerdo con Mayo Clinic, durante la exploración física, el médico revisará las articulaciones para detectar hinchazón, enrojecimiento y temperatura, y sugerirá realizarle algunas de las siguientes pruebas:
Análisis de laboratorio de diferentes líquidos corporales como la sangre, la orina y el líquido sinovial.
Radiografías, tomografía computarizada, imágenes por resonancia magnética y ecografía.
Vital el ejercicio
Los CDC recomiendan hacer actividad física que no implique esforzar las articulaciones. Esto puede aliviar el dolor y mejorar su función, estado de ánimo y calidad de vida.
Hacer actividad física también puede retrasar el comienzo de la discapacidad relacionada con la artritis. Es recomendable que el paciente se mantenga tan activo como lo permita su salud.
Puede hacer ejercicios de manera segura con los siguientes consejos S.M.A.R.T.:
- Siempre comience con poco y aumente de a poco.
- Modifique la actividad cuando los síntomas de artritis aumenten; intente mantenerse activo.
- Haga Actividades que no impliquen esforzar las articulaciones.
- Reconozca lugares que sean seguros y formas de estar activo.
- Trate las dudas con un profesional de la salud o especialista en actividad física certificado.
Se recomienda realizar actividad física aeróbica de bajo impacto como caminar vigorosamente, andar en bicicleta, nadar y bailar. También benefician los ejercicios aeróbicos en el agua, hacer trabajo liviano de jardinería y tomar clases de ejercicio grupales.
Igualmente, se pueden realizar ejercicios para fortalecer los músculos con pesas y bandas de resistencia.
Los ejercicios de flexibilidad, como los de estiramiento y yoga, también son importantes para las personas con artritis, pues hacerlos a diario ayuda a mantener el rango de movimiento.
Por último, los ejercicios para el equilibrio como caminar hacia atrás, pararse en una pierna y tai chi son importantes para aquellos que están en riesgo de caerse o que tengan dificultad para caminar.
Sentir dolor luego de realizar la actividad física es normal, según los CDC, ya que puede tomar entre seis y ocho semanas para que las articulaciones se acostumbren al nuevo nivel de actividad.
Prevalencia en Puerto Rico
El Plan de Acción de Enfermedades Crónicas para Puerto Rico del Departamento de Salud establece que del, 2014 al 2020, el 19.7% de la población de 18 años o más auto reportó haber tenido un diagnóstico de artritis.
En términos de edad, uno de cada dos adultos de 65 años o más reportó tener artritis a diferencia de los adultos de 25-34 años, en donde solo el 3.9% dio a conocer un diagnóstico de artritis.
En cuanto al factor socioeconómico, en los adultos con ingreso anual del hogar menor a $15,000, la prevalencia de artritis fue 27.1%. Esta prevalencia fue significativamente mayor que la observada en los individuos que reportaron un ingreso anual del hogar de $15,000 o más. Esta misma tendencia se observó en los adultos no graduados de escuela superior.
Cuando se trata del género, la artritis es significativamente más prevalente en mujeres que en hombres.
Predominante en Estados Unidos
De acuerdo con el Instituto Nacional de Artritis y Enfermedades Musculoesqueléticas y de la Piel de Estados Unidos, más de 50 millones de adultos en este país tienen artritis, haciéndola una de las enfermedades predominantes y la causa más común de discapacidad. Asimismo, 24 millones de adultos tienen limitaciones de sus actividades a causa de la artritis.
Aproximadamente, una de cada cuatro personas en el país está afectada por la artritis. Cerca del 40% de los adultos con artritis pueden reducir el dolor y mejorar su funcionalidad en un 40% al volverse físicamente activos.