La pediatra Laura Domenech, Senior Medical Officer de Ponce Medical School Foundation en Ponce, pidió a los residentes de Puerto Rico que ya recibieron la vacuna Janssen de Johnson & Johnson contra la enfermedad COVID-19 que mantengan la calma.
Esto, luego de que el Departamento de Salud detuviera el uso de esta vacuna por recomendación de la Administración de Medicamentos y Alimentos y los Centros para el Control de Enfermedades de Estados Unidos, luego de reportarse seis casos de personas que desarrollaron coágulos de sangre luego de recibir la dosis.
“Le diría que estemos tranquilos. La vacuna trabaja y funciona muy bien”, afirmó la médica en entrevista con Voces del Sur.
Al momento, se han administrado más de 6.8 millones de dosis de esta vacuna en Estados Unidos. Los seis casos del coágulo sanguíneo raro y grave se han dado en mujeres de entre 18 y 48 años. Una de ellas murió y otra fue hospitalizada en estado crítico.
“Solamente se han identificado seis casos, de seis mujeres que desarrollaron unos coágulos. Esto es de siete millones de dosis que se han puesto en Estados Unidos. O sea, que la vacuna es segura”, reiteró.
Como parte de este proceso de evaluación, la FDA podría determinar cambiar la autorización de uso de emergencia de esta vacuna, revertirla, o no hacer nada y dejar que se siga administrando.
“Ellos detuvieron la vacuna y lo que están haciendo es identificando esos casos y verificando qué fue lo que sucedió para que entonces, si encontramos que a más personas les sucede, podemos reconocerlos a tiempo y tratarlos a tiempo”, indicó Domenech.
La vacuna Janssen consiste de una sola dosis y fue autorizada para personas mayores de 18 años. En Puerto Rico también se están usando las vacunas de Pfizer y Moderna, ambas de dos dosis.