Michelle Estrada Torres
Voces del Sur
Plaza del Caribe en Ponce reabrirá el lunes, 1 de junio con medidas de registro, cernimiento, higiene y distanciamiento físico que ya son cotidianas en medio de la pandemia de COVID-19, pero que cambian totalmente la experiencia de visitar el centro comercial.
Susana Santiago, directora de mercadeo del mall, dijo hoy a Voces del Sur que esperan una reapertura con el 10% de sus 130 tiendas abiertas.
“Nosotros entendemos que vamos a seguir lo mismo que está pasando en los Estados Unidos, que empiezan en un 10% y así sucesivamente. En Estados Unidos en este momento el 35% de las tiendas están abiertas. Nosotros queremos y aspiramos a que esté más del 50% en un periodo de cuatro semanas, pero eso lo va a determinar cada tienda dependiendo de las necesidades que ellos tengan que cumplir”, explicó Santiago.
Los comerciantes se encuentran, actualmente, en el proceso de reorganizarse para retomar labores. De hecho, durante el recorrido que Santiago y el gerente general del mall, Edwin Tavárez, hicieron hoy con varios medios de comunicación se observaron empleados en Marco’s Pizza, Soft & Creamy y Sizzler.
“Cada cual tiene que hacer su autocertificación, así que todas las tiendas están en su proceso de volver a traer sus empleados, de hacer sus procesos internos de limpieza y desinfección, así que eso conlleva un tiempo”, agregó Santiago.
El principal cambio en este regreso es el requisito de registrarse previamente. Esto, debido a que no se puede superar la capacidad máxima de visitantes al mismo tiempo, que es 5,200 personas (25% de la capacidad del mall).
La información sobre la apertura de tiendas se proveerá en la página y redes sociales de Plaza de Caribe. Por lo pronto, las tiendas que quieran mantendrán el sistema de compra por Internet y recogido en el centro comercial.
A continuación, las medidas implementadas por Plaza del Caribe para volver a recibir público:
El visitante deberá registrar su visita a través de la aplicación del centro comercial, que está disponible para dispositivos Apple y Android. Allí escogerá el día y la hora de su visita, que solo será posible en dos bloques de cuatro horas: 9:00 a.m. a 1:00 p.m. o 1:00 p.m. a 5:00 p.m.
El visitante deberá presentarse en la entrada para la que reservó -Kokomo, Oriental-Santander o Sizzler-, con un solo acompañante. Un guardia corroborará el registro y le tomará la temperatura. Si fuera mayor de 100.4 grados F, no podrá entrar. El visitante deberá llegar por lo menos una hora antes de la hora límite de su bloque (12:00 p.m. o 4:00 p.m.).
Si no puede hacer el registro virtual, tiene la opción de llegar al centro comercial y optar por el pase Walk-in. El guardia verificará si hay cabida en ese momento, le proveerá un código, lo hará pasar si está bien de temperatura y lo enviará inicialmente al mostrador de servicio al cliente para que le oriente sobre cómo hacer el registro digital para futuras ocasiones.
En el lobby de la entrada de Sizzler, donde ubicaba el antiguo carrusel, hay 52 marcas en el suelo con distancia de seis pies una de la otra.
Los pasillos están marcados en el suelo para que se sepa cuáles son los caminos de ida y vuelta y la gente no se encuentre.
En el atrio central solo se puede caminar en una dirección. Si tiene que cruzar, podrá hacerlo por el centro.
En el food court se redujo la cantidad de mesas y sillas para que estén más distantes unas de otras. Caben 200 personas sentadas al mismo tiempo.
Cuando alguien termine de usar una mesa del food court, un empleado colocará un aviso para advertirle a otras personas que no la elija en lo que la limpian.
Por el sistema de audio del centro comercial se pasarán cinco mensajes de orientación a los visitantes.
Hay estaciones con desinfectante de manos. En los elevadores hay marcas que ilustran dónde se deben parar las personas y también se han tomado medidas en los baños.
Los visitantes recibirán un mensaje de texto cuando falten 30 minutos para culminar su pase.
Publicado: 26 de mayo de 2020